Por Redacción Investigativa: Una serie de inconsistencias y omisiones en el manejo de recursos públicos por parte de la Federación Colombiana de Sóftbol, en el marco del contrato CAIP-488-2025, han despertado preocupaciones serias por parte del Ministerio del Deporte. El documento oficial del ente gubernamental revela que la Federación no realizó la transferencia bancaria internacional directamente entre entidades financieras —como era esperable—, pese a tener la información bancaria completa del destinatario: la WBSC Américas Softball.
Según lo revelado por el supervisor Hugo Germán Méndez León, profesional designado para la supervisión del contrato, en vez de realizar la transferencia entre el Banco Caja Social y el banco receptor internacional, la Federación optó por comprar dólares (US$53.102) a través del Banco Unión y retirarlos en efectivo, desembolsando una suma en pesos de $217.718.200 . Esta operación, calificada como riesgosa e irregular, fue ejecutada pese a que las facturas incluían todos los datos necesarios para una transferencia segura y trazable.
“La pregunta de esta supervisión es la justificación financiera por la cual la Federación Colombiana de Sóftbol NO realizó la transferencia bancaria entre bancos (...), minimizando el riesgo financiero así como de seguridad de los integrantes de la federación como del organismo internacional”, indica el informe.
La decisión de mover tal cantidad de dinero en efectivo levanta alertas sobre la transparencia en el uso de recursos públicos. El contrato CAIP-488-2025 fue diseñado para apoyar la realización de eventos internacionales de sóftbol con sede en Colombia, y se esperaba que cada gasto fuera soportado con información verificable, como lo establece el Manual de Líneas de Inversión.
Más inconsistencias: montos no coinciden y documentos incompletos
El informe también destaca otras inconsistencias:
Extracto bancario y documentación faltante La supervisión también requirió explicaciones sobre una consignación de $25.000 a la cuenta del contrato —cuenta que debería ser de uso exclusivo para recursos del CAIP-488-2025—, sin que se haya justificado adecuadamente.
Además, hasta la fecha del informe (julio de 2025), la Federación no había entregado el movimiento financiero actualizado ni el extracto bancario del mes, lo que impide realizar una verificación completa de la ejecución de los recursos.
Conclusión: se tambalea la legalización del primer desembolso
El Ministerio del Deporte fue enfático: si no se entrega la documentación requerida —incluidas certificaciones firmadas por los miembros del Ministerio que supuestamente autorizaron el uso de ciertos rubros— y si no se corrigen las inconsistencias encontradas, los gastos señalados no serán legalizados. Este episodio plantea serias dudas sobre la gestión de los recursos públicos en el ámbito deportivo, y deja al descubierto prácticas administrativas que podrían comprometer la legalidad y transparencia de la Federación Colombiana de Sóftbol.
Aquí puede leer el informe del interventor del contrato: